La vida se me sienta a horcajadas,
pelo al viento,
y me cabalga
de uno a otro verso,
sin palabras.
Mis palabras
se disparan como besos,
suaves, sonoros,
silentes, secos...
Como una bala.
Tengo un nudo de cervata
que atraviesa mi garganta,
-yo no quiero,
decir que te quiero-
y no es flema,
es esperma de palabra primogenia.
Es poema.
Deshojar tus ojos
y beberme margaritas,
que respondan las flores
lo que yo te quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario